María Quintana tiene 34 años y es una asturiana de Oviedo que llegó a nuestra ciudad con su marido, Dani, quien se incorporaba como investigador y docente a la Universidad de León.
Estudió Empresariales con especialización en marketing, y al concluir la carrera decidió aprender alemán: buscó un destino poco frecuentado por españoles -Konstanz, un pueblo universitario próximo a Suiza- y allí acudía a clases de alemán y trabajaba en temas logísticos para el grupo Inditex.
A su vuelta a España buscó empleo en Asturias, y orientó sus pasos al marketing, que es su auténtica vocación. Trabajó para una startup, para un banco e hizo comunicación institucional en Salvamento Marítimo de Gijón.
El traslado a León en 2018 le abrió las puertas a “varias ofertas para posiciones adaptadas a mi perfil, que me ayudaban en mi objetivo de seguir aprendiendo y desarrollar todo el potencial de los trabajos de marketing”. Tras dos años empleada en el sector, y con sus hoy socias Paula y Eva, decidió montar su propia agencia de marketing digital, Antelia Marketing.
Desde su oficina en el Vivero de Empresas del Ayuntamiento de León -“frente al Parque de Quevedo, que es una maravilla”- trabajan para clientes locales (“muchos necesitan la cercanía de prestarles el servicio desde aquí”) y nacionales (“tenemos buenos clientes en Asturias y Cataluña”) de todos los sectores. Cree que la ciudad ofrece muchas buenas oportunidades para profesionales como ella y sus socias. Le encanta su trabajo y el contacto y atención a los clientes.
A María le gustan los sitios pequeños, ir al trabajo o al cine caminando, y pasear por zonas de esparcimiento como La Candamia, a la que acude habitualmente con sus mascotas, Ringo y Lola.
Muy apegada a su familia y amigos asturianos, la pandemia y las restricciones para viajar a su tierra de origen le dieron la oportunidad de “descubrir más la ciudad y los alrededores y hacer más vida con los amigos de aquí, que nos acogieron muy bien” y ahora disfruta de “la calidad de vida típica de una ciudad pequeña con todo lo que necesitas, a una hora de la playa y a dos horas de Madrid”. Y muy pronto “daremos un paso más” en nuestro asentamiento en la ciudad, pues “hemos decidido comprar piso”.